Cuerpo del olvido

nota

Libros. Poesía y silencio.
Por Florencia Canale
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Nota en revista Veintitrés - 06/05/2015

Prefiero olvidar, / dejar ir, / hacer ayuno de ideas, / y engendrar vacío, / volver a sorprenderme”.

Así se expresa Pablo Durán, en uno de los tantos poemas que conforman Cuerpos velados, su segundo poemario. Antes, con El mutismo de la roca, había obtenido –por su carnal visceralidad– una auspiciosa y exitosa impronta. En esta oportunidad vuelve a sorprender a lo largo de cincuenta poemas que fluyen con singular y excelente maestría.

Pablo Durán es médico pediatra especializado en salud perinatal, y como Asesor Regional ha viajado al interior de nuestro país, a cuatro continentes y treinta y tres países, y el contacto con diversas situaciones vinculadas con esos contextos que no terminan de definirse y requieren ir más allá de lo que la vista nos muestra, inspiran el libro. Sin embargo, no todo es ciencia y conocimiento en la vida de este hombre. También suma a su currículum el amor por la montaña, siendo el Aconcagua uno de los picos que escaló. ¿Será el silencio hallado en esas moles de piedra, o bien la búsqueda infructuosa de los encuentros destinados al eterno desencuentro, aquello que constituye las experiencias de vida del poeta, que luego devendrán en la materia de su poesía? Habrá que leer su reciente publicación para develar el misterio.